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LAS MEJORES CASCADAS DE BALI

Una de las actividades más turísticas de Bali, por no decir la más turística, son sus fantásticas cascadas, ¡Y es que son asombrosas! Podrás encontrarlas por toda la isla, y cada cual te parecerá mejor que la anterior. Por eso hemos preparado una lista con las 4 cascadas de Bali que no te puedes perder.

Aunque la mayoría de las cascadas están plagadas de turistas, vamos a hablarte de una que está tan escondida, y el acceso es tan difícil, que cuando llegues, probablemente podáis disfrutar de esta peculiar cascada totalmente a solas.

1- Tegenungan Waterfall

El primer día en Bali estábamos tan emocionados, que lo primero que hicimos nada más levantarnos fue ir a alquilar una moto, ya que sabíamos que era la mejor opción para movernos por la isla, aunque si necesitas más información sobre las opciones de transporte en Bali, no te pierdas el post.

Después de subirnos a nuestra moto, teníamos muy claro que lo primero que queríamos visitar, era una cascada, y nos dirigimos a que la que más cerca estaba de nuestro alojamiento en Sukawati: Tegenungan Waterfall.

Esta cascada es una de las más frecuentadas de Bali, pero de visita obligada: el “chorro” de agua que cae desde la montaña es impresionante, y más, si como nosotros vas en épocas de lluvias. Podrás elegir entre dos accesos a Tegenungan: por arriba, por la zona de la montaña, usada por muy poca gente y por lo tanto muy recomendable; y la de abajo, por la que entramos nosotros y entra todo el mundo.

Una de las cosas que nos gustó a de esta cascada, es que si te aburres de ella, puedes subir arriba del acantilado para disfrutar de un baño en una agradable piscina, a la vez que te tomas unas cervezas, pues tiene un bar en lo alto muy apetecible. Aunque cobran una entrada de 15.000 IDR (un euro) no es obligatorio hacer una gran consumición: a nosotros nos dieron un vale para unos nachos, y no gastamos nada más.

2- Tukad Cepung Waterfall

Una de las cascadas más famosas de Bali, y probablemente la más fotografiada. Tukad Cepung se caracteriza por estar «escondida» en una gran cueva, la cual apenas deja entrar los rayos del sol, y hace que se forme una imagen increíblemente preciosa. Aunque si vas en un día nublado, las fotos pueden quedarte muy interesantes como a nosotros.

Esta cascada es de fácil acceso: llegarás a un parking en el que si vas en moto no te cobrarán por aparcar. Deberás seguir el sendero que a través de un precioso paseo te llevará hasta tu foto soñada.

Recordamos que nosotros fuimos en época de lluvias, es decir, de menos turistas (si puedes ve en estas fechas, es uno de los consejos para viajar a Bali que os damos), con lo cual la cascada hizo una balsa a modo de piscina, pero si vas en temporada seca (de mayo a octubre), no habrá tanta agua, aunque la imagen sigue siendo igual de idílica. Aquí te dejamos más información con consejos para viajar a Bali

Os recordamos que esta cascada es de las más turísticas de Bali, y si quieres una foto como esta, te recomendamos que vayas a primera hora de la mañana, ya que a partir de las 11h empiezan a llegar muchos grupos.

Recuerdo que nos enfadamos un poco al no poder disfrutar de esta maravilla en condiciones, así que nos fuimos en busca de otro paisaje no tan masificado, y encontramos una pequeña pero preciosa cascada. Sin duda de los mejores instagram spots de Bali.

3- Bangkiang Djaran Waterfall - una cascada oculta

Después de visitar Tukad Cepung, íbamos en busca de la cascada de Tibumana: habíamos oído que el caudal de agua que cae es más impresionante aún que la de Tegenungan.

De camino nos perdimos, y gracias a que nos perdimos, dimos con una de las mejores cascadas de Bali, y muy poco conocida: Bankiang Djaran Waterfall. Al llegar pensábamos que nos habíamos vuelto a perder, ya que aparcamos la moto y no había ni un alma (de normal se suele pagar una pequeña cantidad por usar el «parking»). Bajamos lo que para nosotros fueron 3.000 escalones mientras disfrutábamos de unas vistas inigulables: la vegetación era preciosa, perfecta puesta para que nosotros la admirásemos. Había varios miradores que al asomarte veías que seguían quedando 3.000 escalones que bajar, y eso que no sabíamos muy bien a donde íbamos porque no habíamos leído ni escuchado nada de este lugar.

Seguimos bajando, y aún desde arriba se podían apreciar dos pequeñas piscinas: una de decoración con peces en su interior, y otra como la de templos de purificación.

Lo primero que hicimos a parte de alucinar al no ver a nadie, fue meternos en la piscina y mojarnos con los chorros como hacen los balineses en sus rituales de purificación. Siempre con el mayor de los respetos.

Y esto no acaba aquí. Aún seguimos caminando más, buscando la cascada que oíamos como caía con fuerza. Pasamos la extensa vegetación, y entre toda esa naturaleza se escondían unas pocas escaleras más, que bajaban a la maravillosa cascada.

Por fin llegamos, y ahí estábamos, ¡solos! No nos lo podíamos creer: llevábamos varios días visitando Bali y todo estaba masificado, pero este lugar seguía siendo un misterio.

El agua estaba bastante fría en comparación con el resto, pero aun así, pudimos disfrutar del baño y de estar a solas, de las vistas, de los sonidos… Os confesamos que nos ha costado mucho encontrar la ubicación exacta de esta cascada, pero al final lo hemos conseguido.

Este lugar no dejaba de sorprendernos: al irnos encontramos un puente colgando en medio de toda la vegetación. Estaba un poco escondido pero si acabas visitando este lugar, y de verdad espero que lo hagas, muévete por todos sus recovecos e investiga, te aseguro que no te quedarás indiferente.

4- GitGit Waterfall

Una de las cosas que te recomendamos si viajas a Bali, es que aunque sea por un día contrates un conductor que te lleve a visitar la isla, y si quieres saber más sobre las actividades que puedes hacer en Bali, pincha en este post.

Nosotros cogimos por un día un conductor que nos llevó a ver los mejores sitios, y entre ellos tuvimos la suerte de poder visitar GitGit. Lo mejor de este lugar es que está formado por 6 fabulosas cascadas, de las cuales podrás disfrutar siguiendo un precioso sendero.

El día que visitamos GitGit, el tiempo no nos acompañó, y al estar entre mucha vegetación, la temperatura era un poco baja. Pero mereció la pena ver el espectáculo de cascadas. Ademas de disfrutar de todas ellas, hay un columpio que por un módico precio, y por supuesto regateando, podrás subirte y vivir una experiencia única.


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